Como usuarios y usuarias de los productos y servicios financieros, es nuestro deber proteger la integridad y mantener la seguridad de nuestro patrimonio. Esto puede suponer un reto, en la medida que el dinero deja de ser tangible y nos vamos adaptando a la digitalización de nuestro entorno. Es por ello, que resulta tan importante mantener un contacto frecuente con nuestra entidad financiera y así poder estar al tanto de cualquier novedad que impacte nuestros productos y servicios financieros.
Un factor crucial para lograr este propósito es mantener actualizados nuestros datos en las entidades, no es solo una obligación, sino un beneficio que nos proporciona integridad y seguridad, que a fin de cuentas es lo que estamos buscando.
De ahí que, es nuestro deber informar a la entidad cuando exista alguna variación en nuestra información personal o de contacto, pues al mantener actualizados estos datos, podemos recibir las notificaciones pertinentes que nos alerten u ofrezcan informaciones relevantes, por ejemplo:
- La detección de alguna actividad sospechosa.
- El cambio en los términos y condiciones de nuestros productos financieros.
- Ofertas o promociones especiales que nos resulten beneficiosas y hasta puedan suponer un ahorro.
- Acceso a servicios que nos faciliten trámites, como recibir vía mensajería nuevos plásticos o tarjetas, en caso de reposición o renovación.
- Cualquier tipo de información relevante que pueda afectar nuestras finanzas, como alguna variación de tasas, cargos o comisiones.
Por su parte, las entidades supervisadas también deben cumplir con la validación periódica de los datos de sus clientes en todos sus departamentos para así poder garantizar la comunicación oportuna.
Ten pendiente que, en algunos casos, si contactas a tu entidad, como parte de su protocolo de validación, ésta podría solicitarte que marques alguno de tus datos o confirmar preguntas de seguridad. Sin embargo, y esto es muy importante, si tú no iniciaste el contacto con la entidad, no compartas nada que pueda comprometer la seguridad de tus datos, ya que tu entidad nunca pedirá que brindes información confidencial como tus claves, PIN de acceso, preguntas de seguridad, ni los dígitos de seguridad. Tampoco accedas a enlaces no reconocidos y así evita poner en riesgo tu información.
Cuando vayas a actualizar tus datos, asegúrate utilizar vías seguras para hacerlo. Muchas entidades cuentan con este servicio dentro de sus plataformas web y móvil de banca en línea. Una vez que ya has ingresado a tu cuenta privada, puedes acceder a la opción de “Actualizar datos” o similar y desde allí solicitar los cambios necesarios.
Recuerda, si recibes llamadas con solicitudes de actualización, puedes agradecer a quien te contacte y cerrar el contacto, y luego proceder a comunicarte directamente con la entidad a través de sus números y cuentas oficiales. De esta manera, podrás garantizar que hablas con el personal autorizado para este proceso.
Asimismo, puedes visitar la oficina de tu preferencia para dicha gestión. A través de nuestro Mapa de puntos de acceso bancario podrás ubicar de manera sencilla la oficina más cercana de tu entidad.
Mantener actualizados tus datos personales en tu entidad es una buena práctica para mejorar la seguridad, eficiencia y acceso a los servicios financieros que utilizas. No subestimes la importancia de esta tarea, ya que una pequeña actualización puede hacer una gran diferencia en la protección y salud de tus finanzas.
Recuerda que en ProUsuario estamos para orientarte, escucharte y respaldarte. Para conocer más acerca de nuestro servicio de Orientación Ciudadana accede al siguiente enlace: https://prousuario.gob.do/servicios/orientacion-ciudadana/
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