Uno de los mayores beneficios que obtendrás de llevar a cabo un presupuesto mensual será poder identificar con facilidad ese aspecto donde tienes la oportunidad de reducir tus gastos. Te invadirá un sentimiento positivo cuando veas que estás ahorrando para alcanzar tus metas personales, en lugar de constantemente gastar en asuntos no planificados.
Aquí te damos cuatro ejemplos de gastos familiares que merece la pena analizar para ajustar: comida, energía eléctrica, transporte y arreglo personal. Estas ideas pueden servirte de referencia para analizar tu situación financiera personal, pues en general todas las partidas que necesites o te propongas ajustar pueden ser mejoradas. Lo ideal es que puedas adoptar hábitos diferentes y ejecutar un nuevo plan de forma consciente y constante.
¿Sabías que probar recetas que no lleven carne puede significar un gran ahorro en tu menú semanal? Puedes probar nuevos platos a base de vegetales, como un soufflé de verduras, u otras recetas que contengan vegetales ricos en nutrientes como: berenjenas, brócoli, coliflor, entre otros. Estos pueden brindarle novedad al menú habitual y, de forma notable, traducirse en un ahorro en la compra del súper. Ponlo a prueba para que veas la diferencia, te sorprenderás al lograr un ahorro mínimo de mil pesos semanales estableciendo en el menú un día sin carne.
Otra buena idea es estar más pendiente de las ofertas de los supermercados. Algunas cadenas programan días de rebajas y algunas tarjetas de crédito te ofrecen descuentos adicionales. No obstante, ten precaución al aprovechar ofertas. Procura que esto no te incentive a comprar lo que no necesites. Hacer el menú de la semana puede ayudarte a evitar el impulso de comprar un artículo solo porque está en oferta.
Una idea para los padres que llevan sus hijos al colegio en vehículos particulares es utilizan es compartir espacio con las familias que viven cerca y asisten al mismo centro de estudio. De seguro esto implicará menos consumo de combustible para ambos hogares al hacer la ruta del transporte de la semana.
Anímate a probar cambios y a identificar oportunidades en tu propio presupuesto mensual. Así te acercarás a metas más satisfactorias, por ejemplo, unas merecidas vacaciones. Trata de identificar tus propias partidas de ahorro prestando atención a los montos que puedes ajustar o eliminar, ya sean las mensualidades o suscripciones que no usas.
De esto se trata el ejercicio del presupuesto, de que aprovechemos esta herramienta como guía y tengamos la disciplina de planificar antes de gastar el dinero. En el transcurso, vamos registrando los gastos reales al lado del planificado. A fin de mes lo volvemos a revisar para ajustar el próximo plan.
Si eres de los que aún no se han animado a llevar con seriedad la herramienta del presupuesto mensual, puede ser que este artículo te anime a aprovechar los beneficios económicos y emocionales que esta práctica es capaz de generarte, siendo el primero de ellos la tranquilidad de saber con qué cuentas
Visita la guía básica del presupuesto en este enlace: https://prousuario.gob.do/media/lpbhlsvn/guia-de-presupuesto-personal.pdf