La salud financiera depende, en gran medida, del equilibrio constante entre nuestros ingresos y gastos. Como los ingresos suelen ser una variable más difícil de controlar, es posible que, al aplicar esta fórmula, el mayor peso descanse sobre nuestros hábitos de consumo.
En mayor o menor medida, el riesgo de enfrentar dificultades a la hora de honrar tus compromisos financieros siempre está presente. Si tuviste alguna situación difícil que te colocó en esta posición y tu préstamo entró al estatus de legal o castigado, incluso si ya lograste saldar hasta el último centavo, hay un recorrido importante que debes hacer para restaurar no solo tu perfil como dedudor/a, sino tu tranquilidad financiera en general.
En medio de la crisis mundial de salud que nos afecta, el entendimiento y cuidado de los factores que determinan nuestra salud integral cobra una especial importancia. Además de la salud física, otros dos factores importantes que impactan en nuestro bienestar son: la salud de nuestras finanzas y la salud de nuestra mente.
La elección de tu entidad financiera es un paso sumamente importante a la hora de administrar tus finanzas. El papel de tu banco o asociación de ahorros y préstamos será crucial, no solo porque una buena elección te proporcionará seguridad, sino también porque te permitirá el acceso a los instrumentos idóneos según tus prioridades financieras.
Este es un inicio de año extraordinario, pues además del típico desequilibrio luego de las fiestas navideñas, a este enero se agrega la sombra de una crisis sanitaria global con fuerte impacto económico, expresado en la pérdida de empleos y el aumento de la pobreza.