La vida está llena de sorpresas, y algunas veces nos encontramos en momentos financieros difíciles que no habíamos anticipado. Si actualmente estás enfrentando problemas para pagar tus préstamos, no eres la única persona en esta situación. A continuación, te presentamos una guía práctica sobre qué hacer si, por razones de fuerza mayor, no puedes pagar tus préstamos.
Las dificultades son parte del trayecto de la vida, las cosas no siempre salen a la primera y no hay nada malo en equivocarse, siempre y cuando se tenga la disposición de corregir el error luego de identificarlo. El aspecto financiero no es la excepción. Cuando se trata de manejar préstamos o tarjetas de crédito debemos tener un cuidado especial para no caer en malos hábitos, como la falta de planificación o el consumo por encima de nuestra posibilidad de pago. Es importante evitar entrar en un ciclo negativo de deudas y compromisos financieros difíciles de afrontar, que se verán reflejados en lo que llamamos historial crediticio.
Si bien es cierto que tanto la clasificación regulatoria como el score crediticio son un reflejo o referencia de tu perfil de crédito e inciden en qué tan atractivo eres para que las entidades de intermediación financiera (EIF) puedan ofrecerte un producto, no es menos cierto que te puede surgir la siguiente duda: ¿Por qué no mejora mi score, aunque tenga la mejor clasificación regulatoria posible? Para responder a esta inquietud, primero tenemos que comprender los componentes de ambos indicadores y sus diferencias.
Cuando se atraviesa por una situación económica difícil, muchas veces es un gran reto saldar las deudas acumuladas; sin embargo, no es algo imposible. Si te identificas con esta situación, debes saber que ahora es el momento preciso para decidirte a enfrentarla. Elaborando un plan de acción es posible salir adelante y poner en orden tus deudas.
Cada año trae consigo retos, cambios y aprendizajes; por lo tanto, es de suma importancia mantenernos atentos y prepararnos para lo que pueda acontecer. Este es el momento preciso para evaluar nuevas oportunidades y poner en perspectiva lo que realmente es importante. Como “guerra avisada no mata soldado”, ahora es el mejor momento para idear un plan de acción. A continuación, te hacemos algunas recomendaciones para que puedas afrontar con éxito los retos económicos de este 2023.
El historial crediticio es un registro que describe cómo has manejado tus deudas a lo largo del tiempo. Este refleja tu comportamiento de pago y, en base a esta información, se determina qué tan probable es que cumplas de manera idónea con el saldo de futuros créditos. Si por alguna razón has dejado de pagar una deuda al banco u otra empresa, tu historial se verá afectado, lo que significa que las probabilidades de acceder a un préstamo o servicio básico (telefonía, electricidad, entre otros) se reducen. No obstante, existe la posibilidad de que te recuperes y, posteriormente, se borre “la mancha” de impago de tu historial.
Juan está tranquilo pues maneja su tarjeta de crédito sin estrés. Juan forma parte del de los 55.4% de dominicanos que maneja su tarjeta sin problemas porque paga el total de los consumos cuando llega la fecha de pago. Esto quiere decir que no paga intereses por usar su crédito. Él se siente como un genio, él calculó bien el total de gastos que podía permitirse para no exceder su presupuesto, aprovechó los días de gracia para pagar sus consumos sin intereses y completó su pago total del mes a tiempo.
Dependiendo del nivel de riesgo y la capacidad de pago de los receptores de un préstamo, la entidad financiera requerirá que una o más personas también se comprometen a devolver la totalidad del monto concedido con sus respectivos intereses y cualquier otro cargo asociado.
El presupuesto es la proyección de los ingresos y gastos para un periodo esperado, habitualmente un mes o un año. Se trata de una herramienta clave para unas finanzas sanas y en orden. Nadie discute sus virtudes, pero la verdad es que, en el ámbito personal, su implementación puede resultarnos difícil, llegando incluso a parecernos una misión imposible.
Los temas de finanzas personales parecen despertar un creciente interés, especialmente entre quienes, por diferentes razones, reconocen la importancia de adquirir más conocimiento para administrar mejor sus recursos.