En los últimos años el término educación financiera ha cobrado popularidad en distintos ámbitos. Su auge se explica porque antes era una expresión que utilizaban exclusivamente los expertos en el área económica. Hoy en día muchas personas han decidido conocer acerca de ésta, pues en una definición simple permite aprender a administrar e invertir los recursos. De esa manera, aprenden a obtener, administrar e invertir tu propio capital.
Si has conseguido tu primer empleo, siéntete orgulloso de ti mismo. Ahora que empiezas a contar con un salario fijo se te abren las puertas para alcanzar tus metas y la posibilidad de trazar tu propio camino.
La salud financiera depende, en gran medida, del equilibrio constante entre nuestros ingresos y gastos. Como los ingresos suelen ser una variable más difícil de controlar, es posible que, al aplicar esta fórmula, el mayor peso descanse sobre nuestros hábitos de consumo.
En mayor o menor medida, el riesgo de enfrentar dificultades a la hora de honrar tus compromisos financieros siempre está presente. Si tuviste alguna situación difícil que te colocó en esta posición y tu préstamo entró al estatus de legal o castigado, incluso si ya lograste saldar hasta el último centavo, hay un recorrido importante que debes hacer para restaurar no solo tu perfil como dedudor/a, sino tu tranquilidad financiera en general.
Los datos confirman el incremento del número de mujeres que asumen la jefatura económica del hogar en República Dominicana. La Encuesta Nacional de Hogares de Propósitos Múltiples (Enhogar), elaborada por la Oficina Nacional de Estadística (ONE), revela que la proporción de núcleos familiares liderados por mujeres se amplió en 6.5 puntos porcentuales entre 2016 y 2018, al pasar de 33.3% a 39.8%.
Las mujeres administran mejor el dinero familiar, de acuerdo con varios estudios que exploran la materia. Ellas dedican una mayor parte de los ingresos a inversión en salud y educación, reduciendo la posibilidad de traspasar la pobreza a la siguiente generación
La educación financiera de tus hijos debe comenzar en casa y, mientras más temprano inicie, será mejor.