Se acercan los últimos días del año y, con ellos, las tradicionales compras festivas. Si bien es una temporada que puede provocar un mayor nivel de excitación, también tiene el potencial de desequilibrar tus finanzas durante meses, inclusive, años.
Los servicios financieros permiten múltiples posibilidades a la hora de gestionar tus recursos. Dependiendo de su uso, pueden convertirse en aliados de tu bienestar financiero o en obligaciones con implicaciones que no siempre son agradables.
Como usuario financiero te corresponde el acceso a toda la información de la cual eres titular. La App ProUsuario está a tu disposición desde cualquier dispositivo vía web y te permite mantenerte al tanto de la evolución de tus créditos mediante el módulo Consulta crediticia.
Una recomendación importante para manejar nuestros productos financieros es la de tener claridad del estatus en que se encuentra cada uno y conocer todas las condiciones que aplican respecto a los mismos, ya que cada acción que tomemos o dejemos de tomar es nuestra responsabilidad y trae sus consecuencias en nuestras finanzas.
Los cargos y consumos implican débitos de tu cuenta, pero no son lo mismo. Los cargos son aquellos débitos que se realizan en tu tarjeta o cuenta de manera automática por motivo de costos del producto.
Las salidas sociales pueden tener efectos bastante positivos en tu estabilidad emocional, pero a la vez existe el riesgo de que, si no las planificas, supongan desequilibrios financieros capaces de revertir todos los beneficios que generan.
Un reclamo recurrente de los usuarios financieros es que su entidad bancaria ha realizado cobros o deducciones sin su conocimiento o autorización expresa.
La inflación es una variable económica que hace referencia al aumento de los precios de los productos y servicios intercambiados en un país en un período determinado.
A todos nos ha pasado que, el día menos indicado, el celular pega un salto mortal y queda con la pantalla inservible, o se nos presenta una enfermedad en el mes en el que más gastos tenemos. Son imprevistos que necesitan atención lo antes posible y, con frecuencia, nos hacen correr a buscar dinero prestado para atenderlos. Lo cierto es que no podemos impedir que ocurran, pero sí podemos evitar que causen pánico en nuestro bolsillo.
Como usuarios de productos del sistema bancario, es importante estar conscientes de la posibilidad de ser victimas de cualquier robo a la información personal o financiera. Cualquier acción que conlleve el uso de documentación personal nos expone a riesgos, especialmente al realizar diligencias o transacciones bancarias.